Hace más de dos mil años, Jesús esclarece y conforta a todos con Sus enseñanzas de Amor, Justicia y Solidaridad. En Su Primera Venida Visible a la Tierra nos dio también contribuciones fundamentales para todas las áreas del saber humano y nos enseñó, a partir de Su propio ejemplo de dedicación a la Humanidad, cómo conducirnos en nuestras vidas con el fin de alcanzar la tan anhelada Paz.
Por ser Jesús universal, Sus enseñanzas elevan la calidad de la vida humana exponencialmente, independientemente de la creencia que el individuo tenga. Por ser Él el Cristo Ecuménico, el Divino Estadista , conforme proclama la Religión de Dios, del Cristo y del Espíritu Santo1 . Afirma su Presidente Predicador, José de Paiva Netto:
“Jesús es, por encima de todo, una generosa y actualísima idea en marcha que merece ser estudiada y vivida por todas las Almas antisectarias, liberadas de prejuicios y tabúes”.
Vea a continuación algunos relatos registrados en Su Evangelio Apocalipsis . Y, a partir de las valiosas lecciones del Celestial Amigo y de análisis hechos por el Presidente Predicador de la Religión del Amor Universal, comprenda por qué esperamos con gran felicidad la promesa del Regreso Triunfal de Jesús:
La predicción del nacimiento de Jesús: “Entonces, el Ángel Gabriel le dijo: María, no temas, porque has encontrado gracia ante Dios. Quedarás embarazada y darás a luz un hijo, a quien llamarás por el nombre de Jesús.”
Evangelio, según San Lucas, 1:30 y 31.
Imagen: Philippe de Champaigne – La anunciación (Foto: Philippe de Champaigne) Los Ángeles y los pastores: “Y, súbitamente, apareció con el Ángel una muchedumbre de la Milicia Celestial, alabando a Dios y diciendo: ‘Gloria a Dios en las Alturas, Paz en la Tierra a los Hombres (a las Mujeres, a los Jóvenes, a los Niños y a los Espíritus, Almas Benditas) de Buena Voluntad de Dios’.”
Evangelio, según San Lucas, 2:13 y 14.
Imagen: James Tissot – La Adoración de los Magos (Foto: James Tissot) El Niño Jesús en Nazaret: “Crecía el niño y se fortalecía, estaba lleno de sabiduría; y la gracia de Dios estaba sobre Él.”
Evangelio, según San Lucas, 2:40.
Imagen: Heinrich Hofmann - Cristo en el Templo (Foto: Heinrich Hofmann ) El testimonio de San Juan: “Hay también muchas otras cosas que Jesús hizo. Si todas ellas fueran relatadas una por una, creo yo que ni aun en el mundo entero entrarían los libros que serían escritos.”
Evangelio, según San Juan, 21:25.
Imagen: James Tissot – El Sermón de las Bienaventuranzas (Foto: James Tissot) Jesús conforta a los discípulos: Incluso sabiendo todo lo que habría de pasar con la crucifixión, Jesús consolaba a los discípulos y también a todos nosotros al afirmar: “Y, después de irme y de prepararles un lugar, regresaré para llevarlos conmigo, para que ustedes estén en el mismo lugar en donde Yo voy a estar. No los voy a dejar huérfanos y estaré con vosotros, todos los días, hasta el fin del mundo”.
Evangelio, según San Juan, 14:3 y 18.
Imagen: James Tissot – La oración del Señor (Foto: James Tissot) La crucifixión: Aun así, la Humanidad Lo crucificó. Sin embargo, hasta en el sufrimiento, Él nos dio otra valiosa lección: “Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen”.
Evangelio, según San Lucas, 23:34.
La Cruz y el Rey: “Cuando Lo entronizaron en la Cruz, Él se convirtió evidentemente en Rey. Ya Lo era y así entonces se constituyó, a la vista de todos , delante de los ojos aún empañados de la Humanidad. Por el modelo de resistencia al Dolor moral y espiritual, del que fue y es paradigma, se alzó como ejemplo que todos debemos seguir.”
Paiva Netto, en el libro Jesus, a Dor e a origem de Sua Autoridade — O Poder do Cristo em nós (Jesús, el Dolor y el origen de Su Autoridad — El Poder del Cristo en nosotros), pág. 239.
Imagen: Carl Bloch – El Entierro de Cristo (Foto: Carl Bloch) La Resurrección de Jesús. Su aparición a las mujeres: Con Su Resurrección, el Divino Maestro nos muestra que no hay desafíos que no puedan ser superados. “Pero, el Ángel, dirigiéndose a las mujeres, dijo: No teman; porque sé que buscan a Jesús, que fue crucificado. Él no está aquí; resucitó, como había dicho. Vengan y vean donde Él yacía.”
Evangelio, según San Mateo, 28:5 y 6.(Foto: Arte) La visión de Jesús glorificado: Y el Divino Resucitado continúa amparando a la Humanidad al entregar a San Juan, el Evangelista Profeta, por intermedio de un Ángel, el Apocalipsis. Y el discípulo, en la isla de Patmos, ve al Cristo Vivo, ¡el verdadero autor del Apocalipsis y el Único capaz de revelar las Profecías de Dios a los pueblos!
“Tan pronto como Lo vi, caí como muerto a Sus pies. Él puso Su mano derecha sobre mí, diciendo: No temas: Yo soy el Alfa y la Omega, el Primero y el Último. Fui crucificado, pero estoy aquí: estoy vivo por los siglos de los siglos , y tengo las llaves de la muerte y del infierno.”
Apocalipsis, según San Juan, 1:17 y 18.
Imagen: Sátyro Marques – La Visión del Trono de Dios (Foto: Sátyro Marques) Las amonestaciones y las promesas finales: Por lo tanto, Jesús vive y anuncia Su Regreso en el Libro de las Profecías Finales: “He aquí que vengo sin tardanza, y conmigo está el galardón que tengo para retribuir a cada uno según sus obras”.
Apocalipsis, según San Juan, 22:12.
El Regreso de Jesús sobre las nubes va mucho más allá del significado literal: “‘He aquí que Jesús viene con las nubes, y todos los ojos Lo contemplarán’ (Apocalipsis, 1:7), es decir, viene a elevar la Religión, la Ciencia, la Política, la Filosofía, el Arte, la Economía, el Deporte y todo lo demás a esa iluminación que desciende de lo Alto, traída por Él en Su Regreso magnífico, literal o espiritualmente realizado”.
Artículo El Regreso Triunfal de Jesús , del escritor Paiva Netto.
Imagen: Sátyro Marques – El Cristo, el vencedor de la bestia y del falso profeta (Foto: Sátyro Marques) La conclusión del libro: Con esas palabras, San Juan termina el Último Libro de la Santa Biblia: “El que da testimonio de estas cosas dice: Ciertamente vengo sin tardanza. Amén. ¡Ven, Señor Jesús! ”
La Bendición
“La gracia de Nuestro Señor Jesucristo sea con todos. Amén.”
Apocalipsis, 22:20 y 21.
Imagen: Sátyro Marques – La bendición (Foto: Sátyro Marques) La encarnación del Verbo: “En el principio era el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios. Él estaba en el principio con Dios. Todas las cosas fueron hechas por Él, y nada de lo que se hizo fue hecho sin Él: ¡Cristo Jesús!”
Evangelio, según San Juan, 1:1 al 3.(Foto: Shutterstock)
+ Jesús resucitó y prometió que regresará
+ ¿Quién es Dios?
+ ¿Por qué Jesús necesitó ser crucificado?
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1 Religión de Dios, del Cristo y del Espíritu Santo — También denominada Religión del Tercer Milenio y Religión del Amor Universal. Se trata de la Religión Ecuménica de Brasil y del mundo.